¡Haz bien y no mires a quién!
03/03/2017 - RSE
Hace pocos años parecía que todos teníamos claro el refrán de ¡Haz bien y no mires a quién! Y de hecho las ONG y los miles de voluntarios trabajaban con esta premisa, y muchas siguen haciéndolo. Y esto es perfecto, pero actualmente la sociedad se plantea las consecuencias de Hacer el Bien ¿A que llamamos bien? ¿Porque destinar la ayuda a este sector y no a otro? ¿Quién está más necesitado? ¿Dónde serán más útiles los recursos materiales y humanos? ¿Qué organización sacará más provecho a mi donación? ¿Por qué apoyar esta actividad y no otra que podría tener un mejor impacto en el futuro?
Estas y más preguntas se plantean los grupos de interés que, de una u otra manera, intervienen en actividades sociales.
Por este motivo, la sociedad exige a las organizaciones que sean más transparentes en lo que se refiere a su gestión y también que cuenten cuales son, a la larga, los resultados conseguidos. Es decir cómo ha cambiado la vida de las personas a las que ayudan o que cambios, positivos o negativos, se producen como consecuencia de sus actividades.
Para dar respuesta, las buenas organizaciones, se someten a auditorías y miden todo lo posible, a veces invirtiendo mucho tiempo y dinero. En la medición de proyectos sociales, como en todo, debe darse el discernimiento para saber seleccionar la opción más adecuada, dependiendo de los fines que se busquen con la misma y del presupuesto disponible.
La diversidad de modelos de medición hace difícil o imposible la comparación. Por esto, nos planteamos si no sería más sensato y valioso, que todas las entidades usaran el mismo sistema de medición para todos sus proyectos, en general, y dejaran las metodologías complejas y costosas para investigar los posibles resultados de grandes inversiones. Los modelos que se construyen para medir un solo proyecto, son más valiosos para hacer una investigación previa de los posibles resultados, que para medir a posteriori.
En opinión de muchos, construir un mismo sistema de medición, para las diferentes actividades, parece imposible. Esto ocurre porque se pone el foco en las diferencias y no se miran cuáles son los indicadores fundamentales y comunes para todos.
Trabajar en favor de la definición de un modelo común de medición, cuyo lenguaje sea de fácil comprensión y accesible a todas las organizaciones, es fundamental para que los grupos de interés de las grandes y pequeñas organizaciones puedan responder a muchas de sus preguntas.
En MAS Business trabajamos por definir un estándar de medición de proyectos sociales que ayude al entendimiento entre las distintas organizaciones y grupos de interés.
Sonsoles Garcia
Estas y más preguntas se plantean los grupos de interés que, de una u otra manera, intervienen en actividades sociales.
Por este motivo, la sociedad exige a las organizaciones que sean más transparentes en lo que se refiere a su gestión y también que cuenten cuales son, a la larga, los resultados conseguidos. Es decir cómo ha cambiado la vida de las personas a las que ayudan o que cambios, positivos o negativos, se producen como consecuencia de sus actividades.
Para dar respuesta, las buenas organizaciones, se someten a auditorías y miden todo lo posible, a veces invirtiendo mucho tiempo y dinero. En la medición de proyectos sociales, como en todo, debe darse el discernimiento para saber seleccionar la opción más adecuada, dependiendo de los fines que se busquen con la misma y del presupuesto disponible.
La diversidad de modelos de medición hace difícil o imposible la comparación. Por esto, nos planteamos si no sería más sensato y valioso, que todas las entidades usaran el mismo sistema de medición para todos sus proyectos, en general, y dejaran las metodologías complejas y costosas para investigar los posibles resultados de grandes inversiones. Los modelos que se construyen para medir un solo proyecto, son más valiosos para hacer una investigación previa de los posibles resultados, que para medir a posteriori.
En opinión de muchos, construir un mismo sistema de medición, para las diferentes actividades, parece imposible. Esto ocurre porque se pone el foco en las diferencias y no se miran cuáles son los indicadores fundamentales y comunes para todos.
Trabajar en favor de la definición de un modelo común de medición, cuyo lenguaje sea de fácil comprensión y accesible a todas las organizaciones, es fundamental para que los grupos de interés de las grandes y pequeñas organizaciones puedan responder a muchas de sus preguntas.
En MAS Business trabajamos por definir un estándar de medición de proyectos sociales que ayude al entendimiento entre las distintas organizaciones y grupos de interés.
Sonsoles Garcia